Una de las principales razones de la existencia de Linux Mint es la gran cantidad de codecs, drivers, fuentes y programas que no se incluían por defecto en Ubuntu al tener una licencia restringida en algunos países y que, ahora, vienen incluidos desde el inicio en esta distribución. Otras de las ventajas ofrecidas por Linux Mint son las aplicaciones creadas expresamente para la gestión de diversos aspectos del sistema como la instalación de programas, la ejecución de los mismos, la actualización del software instalado o la personalización del escritorio. La ausencia total de virus o spyware y la seguridad que ofrece Linux en las distribuciones en las que está incluido, como Linux Mint, son otros de los puntos a tener en cuenta. La distribución es totalmente gratuita y de código abierto, y recomendable tanto para usuarios domésticos como para el trabajo en empresa. Poco a poco se van agregando funciones y elementos de la interfaz que hacen cada vez más exclusiva la experiencia de uso. La apariencia de los menús, el manejo de ventanas, la independencia del escritorio sobre el que se ejecuta e incluso el catálogo de software disponible en el instalador de paquetes van haciendo de Linux Mint algo más que una variante de Ubuntu. Además, si no te atreves a crear o editar particiones de tu disco duro, Linux Mint ofrece una herramienta que facilitará su instalación directamente desde Windows por medio de SU live-cd que permite ejecutarlo al vuelo.

Linux Mint es una distribución Linux basada en Ubuntu y Debian que pretende ser aún más sencilla y agradable de usar que éstas. Al estar basada en Ubuntu, todos los programas hechos para la distribución de Canonical también serán funcionales en Linux Mint.